Agro
Semilla certificada de frijol marcará la diferencia en ciclo 2022-2023
>La semilla certificada de frijol mejora los rendimientos y es más resistente a efectos climáticos.
FOTOS: Archivo Luz Noticias.
La Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur (AARFS) hizo un llamado a los productores a sembrar frijol con semilla certificada, y 100 por ciento verificada por el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS) que garantice el rendimiento de la cosecha, destacó el presidente del organismo privado, César Enrique Galaviz Lugo.
«La agricultura es una de las actividades con mayores riesgos; el clima, agua, altos costos de producción, falta de apoyos, volatilidad de precios, entre otros, son factores externos que todos los años nosotros los productores tenemos que enfrentar para ser más rentables al sembrar frijol; sin embargo, hay cosas que sí están en nuestras manos como elegir semilla de siembra de la mejor calidad y pureza, que nos den la confianza de poder cosechar buenos rendimientos», indicó.
El líder agrícola realizó un llamado a todos los productores para que se acerquen a casas comerciales o distribuidores de semilla de frijol certificada y no pongan en riesgo su inversión.
Dijo que los agricultores deben de analizar muy bien su programación de cultivos; buscar ser conservadores en la superficie de siembra de frijol, para no saturar los mercados y así garantizar una comercialización con buenos precios.
«A pesar de los buenos almacenamientos de agua en el sistema de presas del norte de Sinaloa y de lo atractivo que es sembrar un segundo cultivo, aún no tenemos garantizado el ciclo primavera-verano, por lo que tendremos que analizar muy bien nuestra programación de cultivos y así buscar una buena rentabilidad al sembrar frijol», recalcó.
Dijo que es preocupante cómo en los últimos años el consumo nacional de frijol ha disminuido a niveles de casi 1 millón de toneladas, donde actualmente el 47 por ciento corresponde a frijoles negros, 36 por ciento a pintos, 11 por ciento azufrados y 6 por ciento a claros, con un consumo anual per cápita de 9 kg.
