12/18/2025 11:10:00 p. m.
Hay noches en las que basta un swing para desnudar a dos ofensivas. Si nadie coloca el batazo en el momento crítico, el beisbol se vuelve minimalista: una conexión, un error menos, un brazo más firme. Hermosillo sobrevivió así en Tepic, con la frialdad de César Salazar y el respaldo del bullpen.
Los Naranjeros se llevaron un duelo seco, sin concesiones, 1-0 sobre los Jaguares de Nayarit para ganar el juego y la serie, sostenidos por el único daño del juego: en la parte alta del séptimo capítulo, César Salazar volvió a responder y desapareció la pelota por el derecho, su segundo cuadrangular, suficiente en una noche donde todo se disputó al filo de la textura. Es la segunda vez que Salazar realiza este truco en la temporada.
Hermosillo había tenido antes oportunidades para quebrar el cero. En el cuarto episodio conectaron doble de arranque, pero los tres siguientes se fueron dominados y la amenaza se apagó. En la octava entrada llenaron las colchonetas, terreno fértil para marcar, pero Todd Lott falló con rola para doble play y el inning murió sin ruido.
Nayarit tampoco encontró resquicios. Ningún Jaguar pisó la antesala. Apenas en la primera entrada colocaron dos hombres en base, con dos outs, pero Niko Vásquez no pudo responder. A partir de ahí, el contacto existió, mas nunca con oportunidad real de daño.
El mérito mayor se dictó desde la loma. Omar Cruz (1-0) sumó su primera victoria con seis entradas sin daño, seis imparables y tres ponches. Desde el bullpen entraron Sean Reid-Foley, Daniel Missaki y Matt Foster, quien firmó su rescate trece al retirar la novena con tres hombres y un chocolate.
Del lado nayarita, Robert Dugger estuvo a la altura con seis innings en blanco, pero Antonio Garzón (0-1) cargó con la derrota al recibir el cuadrangular de Salazar. Después trabajaron sin turbulencias Carlos Morales, Stephen Gonsalves y Joel Rangel.
El juego quedó resumido en una verdad incómoda: no hay triunfo sin ejecución a la hora decisiva. Naranjeros vuelve a casa para medirse a Mazatlán con el pulso firme, mientras Jaguares intentará recuperar voz en Obregón frente a los Yaquis. El calendario no espera a nadie.