12/08/2025 07:22:00 a. m.
Vivir en las alturas del edificio más emblemático de Los Mochis tiene un precio: 40 mil pesos mensuales, más el costo de mantenimiento.
Ese es el valor de renta del penthouse de la Torre Residencial San Bernardo, una de las construcciones más imponentes de la ciudad y referente arquitectónico desde hace más de tres décadas.
El departamento, completamente amueblado, cuenta con 368 metros cuadrados distribuidos en amplios y lujosos espacios diseñados para ofrecer confort y exclusividad. Entre sus características destacan:
Una recámara principal con baño privado y vestidor.
Dos recámaras adicionales, ambas con baño propio y clóset.
Estancia familiar.
Sala, comedor y estancia de televisión.
Área de bar y desayunador.
Cocina equipada.
Área de lavado.
Cuarto de servicio con baño.
El inmueble también brinda acceso a las amenidades del edificio, que incluyen alberca, palapa, terraza, sala de juntas, recepción, lobby, así como estacionamiento privado y para visitas. Todo ello refuerza la exclusividad del lugar y lo posiciona como una de las opciones habitacionales más privilegiadas de Los Mochis.
La Torre Residencial San Bernardo, con sus 76 metros de altura, se ha consolidado como un símbolo de la ciudad. Su imponente figura domina el horizonte y continúa siendo una de las edificaciones más reconocidas de la región.
La construcción inició a finales de 1993, pero el proyecto enfrentó un fuerte obstáculo debido a la crisis económica de 1994. Aunque la devaluación golpeó al país, la estructura de acero del edificio estaba prácticamente concluida, lo que permitió que tras algunos años de pausa pudiera reactivarse y finalmente completarse.
Desde entonces, la torre se mantiene como el "centinela" de Los Mochis, vigilante silencioso del desarrollo urbano.
Considerado soñador e incluso "loco" por algunos, Cárdenas Cota logró materializar su ambicioso proyecto, que hoy es parte esencial del perfil arquitectónico mochitense.
Tres décadas después, la Torre San Bernardo sigue destacando no solo por su altura, sino por su historia, su arquitectura y por ofrecer espacios residenciales que mantienen viva la aspiración de vivir en lo más alto de Los Mochis.