12/02/2025 10:19:00 a. m.
La mañana en Los Mochis estaba fresca, funcionarios y regidores del Ayuntamiento de Ahome, fueron convocados a un evento que no imaginaron cambiaría su forma de ver.
Bastó que aparecieran las sillas de ruedas, las andaderas y los antifaces negros para que el ambiente cambiara, ninguno imaginaba que un tramo de apenas 150 metros, del la plazuela 27 de septiembre al Monumento a la Mujer, iba a convertirse en un recorrido lleno de miedo, torpeza, risas nerviosas y un silencio que decía más que cualquier discurso.
El grupo de funcionarios, regidores y directores se acomodó en fila, algunos todavía bromeaban, otros respiraban hondo. El director del IMDIS, Carlos Martín Valenzuela, les advirtió, les taparán los monos, se sentarán en la silla de ruedas y vivirán la experiencia que es nuestra forma de vida.
"No saben que les vamos a tapar los ojos... y que van a vivir esto de verdad".
Los antifaces se cerraron y el ruido se volvió más fuerte, el motor de un carro, unas chanclas arrastrándose, un perro ladrando a lo lejos. La regidora María Esther Robles se quejó de que traía el bastón sin bolita, lo golpeaba sin ritmo contra la banqueta y se atoraba en cada hueco.
"Me dio ansiedad... sentí que me iba a caer en cualquier momento", confesó.
El Regidor Feliciano Castro, explicó con brutal honestidad, una experiencia que te hace ver el mundo diferente.
"Dejas de ver el color, la gente, la calle... y te quedas con pura inseguridad", admitió.
Mientras tanto, la Secretaría de Economía Carmen Julia Cabrera Zazueta avanzaba sobre la silla de ruedas. La instrucción fue que nadie ayudara, uso todas sus fuerzas Pero las manos empezaron a arderle con cada giro de las llantas, hasta el punto de mayugarla.
"Estoy cansada y me duelen hasta los dedos", dijo con una mezcla de risa y sorpresa. Y no había avanzado ni media cuadra.
Carlos Martín Valenzuela tomó el micrófono, contó que hace 17 años veía, hasta que un químico lo dejó sin vista.
"Yo caminaba así, con miedo de caer en un hoyo... pero uno empieza a ver escuchando, tocando, oliendo", compartió.
El grupo lo escuchó quieto, como si por un momento entendieran que la dinámica no era un juego, sino una ventana a una vida que él y miles más viven todos los días.
El Regidor Gabriel Vargas admitió que hubo un momento que hasta dejo de respirar. Hubo quien casi cae en un drenaje colapsado, otros quien sintiero que se ahogaba bajo el antifaz y la Directora de SIPINNA Gloria Chavarría confesó que alguien se burló de cómo caminaba.
"Cuando escuché sus burlas me cayó el veinte, así se siente cuando la gente se burla de una discapacidad", indicó.
El Director del IMDA, Pablo García reconoció a todas las personas que con alguna discapacidad hacen una vida normal, trabajan, juegan algún deporte y compiten en alto rendimiento.
Las y los funcionarios se miraban las manos raspadas, y aún se manifestaban algo nerviosos por la experiencia.
En Ahome, más de 70 mil personas viven con alguna discapacidad. La cifra, es más que un número, es la realidad a la que hoy se asomaron por unos minutos los funcionarios de Ahome, que participaron en la caminata "Ponte en mi lugar".