Icono Sección

Opinión

Terminar una Relación

Pensándolo bien.

Francisco Javier Molas López, psicólogo de la Universidad de Granada en España, habla de “no saber terminar una relación”.

Una de las experiencias más temidas por muchas personas es poner fin a una relación. Ya no son felices, ya no sienten conexión. Sin embargo, son incapaces de terminar una relación. 

En muchas ocasiones, detrás de esta incapacidad se esconde el temor a hacer daño. Cuando dejar a alguien implica un gran sufrimiento para el que es «dejado» -o al menos, así se cree-, muchos son incapaces de dar el paso. 

Saber que son «responsables» de un sufrimiento tan profundo en otra persona los paraliza.

Otra de las dificultades a las que nos enfrentamos cuando una relación se acaba es no aceptar «ser dejado». ¿Cuántas parejas siguen adelante porque uno de los dos se niega a terminar? 

Dar unas cuantas oportunidades a una relación no es mala idea, pero cuando tu pareja te expresa en repetidas ocasiones que ya no quiere seguir, ¿por qué forzar la situación? ¿por qué estar con alguien que no quiere estar contigo?

No saber terminar una relación puede implicar un fuerte apego a la otra persona. También puede ser señal de no saber estar con nosotros mismos, fruto de un profundo miedo a estar solos. Intentar luchar por la relación de pareja puede funcionar en algunas ocasiones, sin embargo, cuando la otra persona no quiere alargar más la relación, es momento de aceptar la situación y aprender a soltar.

Por mucho que pensemos que nuestra pareja es «nuestra», realmente es una persona libre que ha elegido voluntariamente estar con nosotros. De este modo, de la misma forma que viene libremente, debería poder irse con la misma libertad.

(Hasta aquí Fco. Javier Molas).

Comentario de JPR:

Este comentario del español Molas Parece influenciado por la estadística de divorcios en toda Europa que ha aumentado sobremanera, mientras que en España no tanto. Bueno, al menos así era hace algunos años.

En este siglo 21, las separaciones han aumentado, incluso en España como en todo el mundo. De ese modo tal vez la queja de no saber separarse cuando alguno lo amerita parezca algo obsoleta, incluso para los países latinoamericanos como el nuestro, dadas las actuales estadísticas mundiales.

Sin embargo, las dificultades de las parejas para llegar “tranquilamente” a un acuerdo de separación sí podrían ser objeto de crítica en el sentido propuesto por Fco. Javier Molas; esto es, no poder dejar a la pareja o no aceptar ser dejado por la pareja.

Tal fenómeno debe todavía estar ahí incluso en los casos que acepten su separación como irremediable.

Con todo, el escrito de Molas no incluye otras problemáticas de las parejas que han durado años, como los hijos y las relaciones familiares adjuntas.

Entendemos que la separación no deja de ser compleja, incluso cuando ambas partes estén de acuerdo en su necesidad.   

Piénsele bien y seguiremos platicando.

WhatsApp: 6688568565

jperezrobles@gmail.com

MÁS DE Javier Pérez Robles