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Opinión

Mujer, Droga y Sexo

Pensándolo bien.

María del Camino, psicóloga española, nos habla de “mujeres, drogas y sexualidad”.

En el ámbito de las drogas y las adicciones las mujeres necesitan una atención especial, dada la dificultad y problemática añadida que se presenta en relación con el género. Sin embargo, para la sociedad en su conjunto sigue existiendo invisibilidad e incluso rechazo hacia las mujeres que presentan adicciones.

A las dificultades para pedir ayuda profesional por los estigmas y prejuicios sociales, se suma la falta de apoyo de la familia a estas mujeres con adicciones además del hecho de que muchas de ellas sufran, malos tratos por parte de su pareja o expareja.

Por todo ello, es necesario un abordaje especial en el tratamiento y prevención de las adicciones que contemple una perspectiva de género.

Las campañas de prevención muchas veces se limitan a explicar que el consumo de alcohol y otras sustancias implican mayores riesgos de salud para la mujer, no sólo por la diferencias biológicas entre sexos, sino además por la interacción que pueda haber en determinadas circunstancias, como el embarazo, que puede aumentar los riesgos para la salud de la mujer.

Sin embargo, la sexualidad es un área hacia la que no suelen ir dirigidas las campañas de prevención en esta materia. Bajo los efectos de las drogas se altera la conducta, no se toman bien las decisiones, ni se piensa con claridad, las personas se dejan llevar más por las circunstancias y se tiene una baja percepción del riesgo, por lo que todo ello puede llevar a alejarse del grupo de amigos para irse con otros no tan conocidos, mantener relaciones sexuales con una persona extraña y no usar protección para evitar enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados.

Por todo ello, el trabajo en materia afectivo-sexual y drogas debe abordarse desde la preadolescencia y la adolescencia, desmitificar creencias, como que el alcohol y otras sustancias mejoran las relaciones sexuales, y tomar conciencia de los riegos que puedan aparecer, así como dotar a los jóvenes de herramientas personales, habilidades sociales, capacidad de toma de decisiones que le puedan ayudar a afrontar la situaciones de riesgo que se les puedan presentar y evitar o minimizar dichos riesgos.

(Hasta aquí María del Camino).

Comentario de JPR:

No hay mucho qué pensar para estar de acuerdo con María del Camino en sus recomendaciones a favor de la concientización de los peligros que vienen con el alcohol y las drogas sobre la sexualidad.

Especialmente con la sexualidad femenina y el embarazo probable que sucede.

Con los hombres también puede haber culpabilidad, pero la diferencia anatómica y fisiológica no tiene la consecuencia que la mujer tiene con el embarazo. Con todo hay quienes resuelven el problema huyendo.

Solamente algunos hombres se quedan con su pareja para enfrentar el resultado de su relación sexual, aunque aun así vivirán una pareja compleja.  

Lo difícil de entender y controlar es que el alcohol y las drogas solo falsean a toda relación sexual.

Piénsele bien y seguiremos platicando.

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