México… Los gritos del pueblo

El cansancio y el hartazgo social de cacicazgos, abusos de poder y actos de alta corrupción  de parte de toda clase de entes políticos, han hecho despertar ya al monstruo de mil cabezas en que se ha convertido este México tan nuestro y tan ajeno.

Y en efecto, la gente pareciera estar saliendo del letargo en que por años habría estado sujeta y sometida a caprichos y voluntades políticas de los poderosos que sin pudor se han dedicado a saquear la riqueza nacional.

Así lo percibo, al escuchar hoy, gritos de rechazo a las imposiciones políticas de quienes a base de dinero manipulan voluntades para ensanchar sus senderos de corrupción. Gritos aislados, sí, pero gritos al fin que poco a poco cobran fuerza y amenazan con seguir creciendo hasta arrasar las cortinas de imposición de líderes y gobernantes.

Son gritos y reclamos públicos de una sociedad cansada, lastimada y humillada. Gritos que antes no se escuchaban y que en muchos de los casos eran patrimonio de los llamados grillos y alborotadores convenencieros, pero que hoy cobran vida en lo que puede ser considerado el fin de ese letargo que parecía no querer salir de esa pesadilla. Pero, que nadie lance campanas al vuelo que la lucha aún es larga y tormentosa.

Es que no son pocos los intereses políticos y económicos que están en juego frente a ese aún efímero despertar de las masas sociales, y ello nos hace ver con las reservas del caso ese inminente despertar social.

En Sinaloa, para no ir muy lejos, dos ejemplos que se contraponen entre sí, nos golpean el rostro tan solo con asomarlo hacia el espectro sociopolítico y empresarial.

Uno.- Ahí está la Universidad Autónoma de Sinaloa secuestrada desde hace varios años por un cacicazgo político enquistado hasta el tuétano en su seno.

En la UAS se deja claro el mensaje y se manifiesta la evidencia de que la academia y la cultura pueden esperar mejores épocas en aras de privilegiar la política.

La reelección de Juan Eulogio Guerra Liera como rector de la casa madre de la educación en Sinaloa, (UAS), sin que surgiera tan siquiera un esbozo de resistencia de parte de la comunidad universitaria es un ejemplo contundente del control absoluto que el líder cierto y único de dicha institución  Héctor Melesio Cuén Ojeda ejerce sobre propios y extraños.

La reelección, no habla de solidaridad y reconocimiento hacia el trabajo realizado por Juan Eulogio, sino más bien nos hace suponer del miedo que en la UAS se tiene de enfrentar la fuerza, y dado el caso, la furia de Melesio Cuén para quien se atreva a lanzar el reto.

Y es que no es poco el poder político y económico que Cuén Ojeda ostenta en Sinaloa, si se toma en cuenta que no solo es dirigente y propietario absoluto de un partido político como el PAS, sino igualmente, una especie de también Rector vitalicio de la propia Universidad.

Los que saben del tema, aseguran que Héctor Melesio ordenó la reelección de Juan Eulogio, ante la necesidad de contar hacia las elecciones constitucionales del 2018, con un Rector incondicional que le diera al PAS el valor político agregado que representa la UAS y que por supuesto requiere para negociar con mayores posibilidades de éxito las candidaturas a disputar.

Ante ello, mi pregunta es necesaria: ¿Y las voces de rechazo a los cacicazgos que líneas arriba describimos y que según mi percepción empiezan a surgir en los diversos ámbitos de la vida pública, no han aterrizado en el recinto universitario?

¿Y esos líderes tan proclives a defender las luchas de las clases sociales y pregoneros de la democracia, la justicia y la autonomía de la Universidad, y que tradicionalmente se forjan en el mayor de los casos en las universidades, donde han quedado?

¿O será que solo esos líderes universitarios solo patalean el terreno que no ofrece agua para sus abrevaderos familiares?... Son solo preguntas.

CASO CONTRARIO, se observa en las filas del magisterio, principalmente en los afiliados a la sección 53 del SNTE, donde sin miedo alguno-Y si lo sintieron lograron vencerlo-, se lanzaron a las calle desatendiendo la orden y lineamiento de sus líderes gremiales para hacerse presentes ante el Congreso del Estado de Sinaloa para protestar contra la aprobación de una reforma a la ley del Issstesin, misma que a criterio de los mentores, atenta gravemente contra sus intereses y conquistas sindicales en materia laboral.

Ese día, en el recinto del poder legislativo resonaron los gritos de protesta de los maestros y maestras en rechazo a una mala intención que habría surgido del ejecutivo del Estado y que lleva implícita la idea de afectar severamente sus intereses laborales.

Ese día, reitero,  se borró del mapa político el liderazgo de Daniel Amador y los líderes marionetas que son colocados en los mandos sindicales para seguir operando y generando beneficios políticos y económicos para un grupo reducido de vaquetones.

Ahí, en esa manifestación de las fuerzas reales del magisterio sinaloense sí se pudo ver el despertar cívico del monstruo dormido… Contrario a lo que se vio en la UAS con la reelección de Juan Eulogio Guerra Liera, en donde “los luchadores de las causas sociales” duermen en sus laureles… Así es la vida.