Meade y Zamora muestran el músculo

Dos secretarios de Estado estuvieron en el transcurso de esta semana por Sinaloa para encabezar actos diversos con sectores productivos de la entidad.

José Antonio Meade, quien es el titular de la SHCP, y José Calzada Rovirosa, en su calidad de jefe nacional de la Sagarpa, fueron los personajes que se hicieron presentes en el solar de los once ríos.

Ambos fueron recibidos y muy bien atendidos por el gobernador Quirino Ordaz Coppel, quien por su carácter de hombre de negocios, en el ámbito de la hotelería, es sobradamente experto en hacer sentir bien a las visitas, máxime si les puede sacar raja.

Y, por supuesto, en el caso de los dos destacados funcionarios del Gobierno de la República, el mandatario supo hacer gala de esa habilidad, lo que sin duda alguna le permitió lucirse como anfitrión y obtener por ende sus propios beneficios.

Pero si usted se pregunta cual secretario de Estado se retiró más contento de Sinaloa, no faltará quien le responda de manera apresurada que el mayormente satisfecho tras su visita a nuestra tierra fue el jefe de Hacienda.

Es obvio preguntar también que razón tendría José Antonio Meade para haberse retirado tan contento de Sinaloa, como se dice. La pregunta exige una respuesta: se asegura que José Antonio Meade registró una excelente recepción por parte de personajes del mundo empresarial y político del estado.

Ello para el titular de la SHCP es un gran aliciente, si se toma en cuenta que sus recorridos de trabajo oficial los aprovecha de manera muy sutil, pero efectiva, para muestrearse y plasmar su imagen ante la ciudadanía, no solo de Sinaloa, sino de todo el país, con vísperas a las elecciones del 2018.

Otro motivo que el jefe de Hacienda pudo haber tenido para irse contento de Sinaloa lo significó el haber constatado que el pupilo que desde estos momentos mueve en nuestro estado, en aras de llevarlo, primero al Senado de la República y enseguida a la gubernatura de Sinaloa, le está respondiendo bien.

Me refiero, por supuesto, a Mario Zamora Gastélum, el mochitense que José Antonio Meade, de manera clara y evidente, lleva de la mano con todo su apoyo para futuras contiendas políticas.

No en balde lo acompañó al acto de la firma de convenio entre el Gobierno de Sinaloa y la Financiera Nacional de Desarrollo, de la cual “Marito” es director, hecho que por cierto ha sabido cacarear muy bien.

Así las cosas, podemos decir que nuestra conclusión es contundente: José Antonio Meade y Mario Zamora cumplieron su cometido, presentarse como una mancuerna de amigos y políticos y mostrar, asimismo, el músculo que están forjando para llegado el momento darle la pelea a cualquiera… ¿Así o más claro?

Por otra parte, respecto a la visita de José Calzada Rovirosa a Sinaloa, habría que decir que en materia de atenciones no se puede quejar; sin embargo, en lo que respecta al trato recibido por parte del sector agrícola las cosas no le resultaron del todo bien, pese a los poco más de 250 millones de pesos que trajo para el abono de las cuentas que Sagarpa tiene con los productores de granos del estado.

Y es que para el sentir de los agricultores el recurso que el titular de Sagarpa logró canalizar para el pago de las deudas pendientes les significó solo una aspirina, según lo dicho por el líder campesino Justo Puerta Mariscal durante una manifestación realizada durante el acto de inauguración de la Expo-Agro, evento al que Calzada Rovirosa fue invitado para el corte del listón simbólico.

Y es que el descontento de los productores no obedece tanto al hecho de que la deuda de Sagarpa no haya sido liquidada en su totalidad con el recurso que se consiguió, sino a que el funcionario federal no ha dado señales de querer sumarse a su lucha para lograr que las próximas cosechas de maíz blanco alcancen los precios que ellos reclaman… "Vamos a quedar muy lejos de los 4 mil 350 pesos por tonelada que estamos exigiendo y ello es injusto, gritó a pecho abierto Don Justo.

Un General de buen corazón.

Se dice que la administración del exgobernador Mario López Valdéz dejó “bichi” a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.

Aseguran que no hay helicópteros, ni patrullas, ni armamento, ni cámaras de vigilancia funcionales. Lo único que la corporación tiene son policías… Esos sí, los dejaron, pero con miedo. Y es que los están cazando como viles conejos.

Y el General Genaro Robles, titular de la Secretaría, no puede encarar a los malos por temor a que en el enfrentamiento caiga gente inocente… Muy buen corazón el de mi General, muy buen corazón.