Icono Sección

Opinión

La Risa

Pensándolo Bien.

Fátima Servián Franco, psicóloga española, nos dice que un día sin reír se fuga por el horizonte como un día perdido. Esta frase puede sonar a campaña de publicidad de un dentista, pero se ha demostrado científicamente que el córtex cerebral libera impulsos eléctricos un segundo después de que comience la risa. 

Al reírnos, el cerebro emite una orden que provoca la segregación de endorfinas, produciendo una sensación interna de confort y bienestar, además de aliviar el dolor y aportar equilibrio a nuestro tono vital.

La risa es un relajante natural y, al igual que sucede con la meditación, la risa consigue que fluyamos hacia un estado atemporal en el que podemos desconectarnos y olvidarnos de todos nuestros quebraderos de cabeza.

La risa es tan terapéutica que hasta tiene su propia derivación en la psicología: la risoterapia. Una estrategia enfocada a producir estados emocionales a través de la risa. Aunque no puede considerarse una terapia porque no cura por sí misma, sí ayuda a contrarrestar, por ejemplo, los efectos negativos de la ansiedad o a disminuir la intensidad de emociones con valencia negativa, como la tristeza.

Beneficios de la risoterapia

La risoterapia ayuda a desdramatizar las situaciones de la vida, desarrollando el espíritu competitivo y optimista. Por eso las personas que realizan risoterapia aprenden a tener una mejor visión de sí mismos, de su entorno y de sus posibilidades. Por eso, esas situaciones que nos hacen reír “de manera tonta” son tan irresistibles.

Lo que nos indica esta técnica es que hay que reír, por lo menos, un minuto durante tres veces al día. Aunque parezca muy poco, es suficiente para que una persona note mejoras en su calidad de vida, siendo la risa una gran medida preventiva frente a estados emocionales no deseados. 

La risoterapia nos permite liberar estrés (bajar nuestro nivel de cortisol) y mejorar nuestra actitud ante las situaciones de la vida.

Diversos estudios científicos han comprobado que reírse es beneficioso para la salud, contribuye a aumentar nuestras defensas y favorece el equilibrio psicológico.

(Hasta aquí Fátima Servián).

¿Qué podemos hacer ante esta defensa de la risa?: Pues ¡reírnos!

Cuando menos sonreír para pasarla bien el día de hoy. Por supuesto que la risa mejora “nuestra actitud ante las situaciones de la vida”, no tenemos nada en nuestra experiencia personal que contradiga esta certeza de Fátima Servián.

En todo caso, el asunto que deberíamos contemplar es simplemente el de tratar de no violentar con nuestra risa algún evento social serio. Por ejemplo, el tratar de no reír escandalosamente en un funeral, un juzgado o en un acto religioso, tiene una lógica social imposible de negar.

Por lo demás, reír cuanto pueda siempre estará a favor de su estado de ánimo.

Usted dele…

Piénsele bien y seguiremos platicando.

jperezrobles@gmail.com

MÁS DE Javier Pérez Robles