Cuén Ojeda… El trato de ida y vuelta

Los escenarios económico, político y social de México presentan momentos de intensa movilidad. Complejos temas encaran tanto los gobiernos de todos los niveles, como los actores y promotores de nuestra economía y desde luego la sociedad misma.

En el ámbito internacional se sufre en estos momentos con la amenaza que vierte el Presidente de la Unión Americana Donald Trump de dar por terminado el tratado de libre comercio, que desde 1994 México mantiene con el poderoso País vecino y con Canadá.

El tema ocupa y preocupa no solo al gobierno mexicano, sino a los hombres de negocios y por supuesto a toda la población nacional.

Y es que la preocupación no es para menos, si entendemos que nuestra estabilidad económica en mucho depende de la movilidad que en todos los sentidos presente el vecino país del norte.

En lo referente al aspecto político, México vive igualmente momentos de importante actividad toda vez que el año entrante habremos de renovar los mandos de la nación.

De todos es conocido que en 2018 se elegirá nuevo Presidente de la República, Senadores, Diputados Federales, Alcaldes y Congresos locales, lo que por sí solo nos hace suponer la ebullición que se vive en torno a los Partidos y entes que conforman todo el panorama político de México.

Y como siempre ocurre, la especulación está a la orden del día. Periodistas, analistas y toda la fauna que se apasiona con el escabroso mundo de la política tratando de exponer sus razones para sustentar su hipótesis respecto al rumbo en que se definirán las candidaturas.

Por ello es que, al opinar sobre la persona que tal o cual partido habrán de elegir para entregarle la estafeta de candidato presidencial, los nombres sobran.

Claro, con la excepción del Partido MORENA, donde todos coinciden… No hay otro, sentencian. El candidato será su líder y protagonista mayor Andrés Manuel López Obrador. Ahí no hay siquiera un asomo de discusión.

Por los rumbos del PAN, las cosas son distintas. La renuncia a su militancia panista por parte de Margarita Zavala habría dejado sin rival al Líder del partido Ricardo Anaya, comentan los que se dicen enterados del tema. 

Otros tienen distinta opinión y consideran que Rafael Moreno Valle pudiera saltar a la palestra en aras de convocar a la unidad en torno al partido y con la fuerza de todos colocarse ante una posibilidad real de aspirar al triunfo electoral. Incluso no faltan los que piensan que el PAN pudiera dar la sorpresa con un importante personaje desligado de los partidos políticos.

Y por los rumbos del PRI, donde se mueven con posibilidades importantes cartas de la baraja tricolor, muchos analistas piensan que la decisión está de hecho tomada.

El candidato presidencial será el todavía Secretario de Hacienda José Antonio Meade Kuribreña, consideran los que se dicen enterados de la forma en que la telaraña política está siendo tejida en Los Pinos.

Por supuesto que hay voces que desentonan con la suposición de que Pepe Meade transita ya por la vía libre hacia la candidatura presidencial tricolor, y exponen los nombres de otros personajes de la élite oficial y partidista que todavía no deben ser descartados como Miguel Ángel Osorio Chong, Luis Videgaray, Aurelio Nuño y José Narro. Son Cuatro de a caballo que blanden sus lanzas de guerra para lo que se ofrezca.

AQUÍ EN SINALOA la efervescencia política cada día está subiendo de tono, asemejando una ola en la que en apasionante vaivén los actores parecen cuidarse de que la marejada no los haga rodar por el suelo con todo y sus aspiraciones.

Para el Senado de la República el escenario predispuesto para el montaje de las candidaturas se complica como nunca. 

Y es que uno de los actores preponderantes del inventario político estatal, sabedor del poder que le otorga una estructura ciudadana construida desde hace algunos años y que resulta electoralmente atractiva para cualquier partido, ha decidido venderse caro.

Nos referimos por supuesto al líder del PAS Héctor Melesio Cuén Ojeda, quien sin rubor alguno grita a los cuatro vientos que sin su apoyo político,  ni el PRI, PAN, o MORENA garantizan su triunfo electoral en Sinaloa.

Y convencido de ello, Melesio Cuén muy quitado de la pena dice estar dispuesto a negociar con cualquier partido, pero advierte que quiere ser candidato al Senado de la República… ¿Me toman o me dejan?, es la pregunta que el también ex – Rector de la UAS les deja de tarea a los líderes partidistas que se le acercan para platicar de  una pretendida alianza.

Pero independientemente de la fuerza política que el PAS tenga en Sinaloa, lo cierto es que Melesio Cuén debiera no ponerse mucho los moños al momento de negociar con los dirigentes de los partidos, ya que si bien es cierto que su oferta política es atractiva, también lo es que dicha fuerza no le alcanza para ganar las elecciones si se tuviera que lanzar en busca de la senaduría como candidato independiente.

Con lo antes señalado podríamos llegar a la conclusión de que Héctor Melesio tarde o temprano tendrá que negociar con algún partido, y no precisamente en los términos absolutos en que él quisiera… Pero ya veremos el desenlace de éste nuevo episodio político en la vida de Sinaloa.