Icono Sección

Opinión

Campañas de odio dividen al país

El Puente.

Al enfrentar a “pobres” contra “ricos” y al “pueblo bueno” contra “empresarios rapaces”, actores políticos (públicos y privados), están generando un peligroso clima de odio en el país.

La confrontación de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), contra la cúpula del sector privado representada por el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, está tensando demasiado el ambiente electoral.

Los discursos de AMLO contra los empresarios son acompañados por una bien organizada y financiada campaña en redes sociales, con mensajes llenos de insultos contra quienes se atreven a criticar al candidato de Morena… y siguen subiendo de tono. 

Pareciera que en su afán de ganar votos no alcanzan a advertir el riesgo que significa fertilizar la semilla de la discordia que se ha venido sembrando de manera sistemática desde que inició el actual sexenio.

No entienden o no quieren entender ambas partes que están alimentando a un monstruo de mil cabezas que sigue creciendo y que después no podrán parar: la violencia.

¿Qué es lo que pasa por la mente de un político que incita al odio contra todo lo que signifique un obstáculo para ganar la elección?

¿Qué pretenden aquellos dirigentes del sector empresarial que se suben al ring electoral, como si fueran candidatos o voceros de campaña? 

¿Acaso estarán conscientes ambos (políticos y empresarios) hacia dónde nos puede llevar una confrontación de esa naturaleza que está dividiendo al país? 

Como si no tuviéramos demasiado con la sangre que a diario se derrama con los crimenes de la delincuencia organizada, los levantados y desaparecidos, los acribillados de carro a carro y los descuartizados. 

No está el horno para bollos, ni el país está para jugar con fuego. 

Las consecuencias de las acciones desesperadas de liderazgos irresponsables pueden ser desastrosas. En varios estados hay grupos sociales incitando al desorden y a la violencia. 

Los saqueos de tiendas departamentales, asaltos a unidades de transporte y linchamientos públicos no han cesado en varios estados del centro y sur del país.

Investigadores y profesores universitarios han alertado sobre el peligro que representan estos grupos compuestos en su mayoría por vándalos, delincuentes y narcomenudistas que no tienen ningún aprecio por la vida.

El ejemplo más reciente de la violencia que está a flor de piel en ciertas regiones ocurrió hace unos días con el linchamiento de un presunto ladrón en la comunidad de Villa Tamulté, Tabasco.

Un hombre fue sorprendido por un grupo de habitantes del lugar cuando supuestamente intentaba robarse una motocicleta acompañado de otros sujetos integrantes al parecer de una banda de asaltantes. No lograron detenerlos a todos, pero a uno de ellos lo golpearon salvajemente, lo desnudaron, lo rociaron con gasolina y le prendieron fuego cuando aún se encontraba con vida.

Si bien es cierto, el video que circula en redes sociales es un claro ejemplo del hartazgo de la sociedad contra la delincuencia y la impunidad, también refleja la preocupante violencia electoral que se está gestando en varios estados.

Y es que durante el linchamiento del presunto delincuente y mientras su cuerpo es consumido por el fuego se escucha a varias personas gritando: “¡Así le irá a Ricardo Anaya, Margarita Zavala y Pepe Meade!”, “¡Muera la corrupción!”, “¡Muera el mal gobierno!”, “¡Arriba Morena hijo de tu puta madre!”, mientras otros pedían que le prendieran más fuego.

¡Cuidado! La violencia se contagia con mucha facilidad, sólo es cuestión de que uno se anime.

GRAFITI  

El narco y la violencia electoral… No es ninguna casualidad que la Organización de los Estados Americanos (OEA) ha hecho un llamado de atención sobre la ola de crímenes que ha repuntado en México durante el actual proceso electoral.

Un asesinato cada cuatro días da motivos suficientes para preocupar a cualquiera.

Y aunque pudiera decirse que en la mayoría de los homicidios donde las víctimas han sido candidatos a alcaldes de municipios del centro y sur del país, no se ha encontrado un móvil político, hay quienes suponen que en el fondo está la motivación de grupos criminales por mantener el control de ciertas zonas.

Sinaloa no es ajeno a la intervención del narcotráfico en asuntos políticos, habitantes de varios municipios han sido testigos de la operación de grupos armados en elecciones recientes… Y nadie puede asegurar que no volverán a intervenir.

¿Está preparado el Estado mexicano para evitarlo?

Twitter: @victortorres_mx


MÁS DE Víctor Torres