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Opinión

A Quirino le urge un golpe de timón

El Puente.

Después de la traumática y dolorosa experiencia que representó para el Congreso del Estado de Sinaloa la aprobación de las cuentas públicas del gobierno de Mario López Valdez, y la cuestionada y poco entendida reforma constitucional en materia de fiscalización, diversas voces han señalado que el grupo parlamentario del PRI le está fallando al Gobernador Quirino Ordaz Coppel.

En lo personal, no tengo suficientes elementos para hacer un señalamiento de esa naturaleza, pero después de lo ocurrido durante el pasado período ordinario de sesiones, y el saldo político que arrojaron los temas antes señalados, lo que sí se percibe con claridad es que los diputados y diputadas del partido tricolor no integran un grupo compacto.

La experiencia vivida obliga al gobernador a revisar dónde y quienes pudieran estar fallando, y sea quien sea, actuar en consecuencia. 

La aprobación de las cuentas públicas fue un capítulo que, si bien, pudo haber cumplido con un acuerdo político a nivel federal, localmente no dejó un buen sabor de boca. 

Así las cosas, en este adverso escenario para el PRI, y con el proceso electoral en puerta, el gobernador debe renovar su estrategia y hacer más política. 

Se requiere, ante todo, una fuerte cohesión del priismo. La unidad es más necesaria que nunca, porque viene la madre de todas las batallas en 2018 y las fuerzas locales serán vitales… Y si alguien necesita esa cohesión y esa unidad es el gobernador Quirino Ordaz.

El gabinete del Gobernador es un gabinete en la sombra. Debe salir a la intemperie, debe actuar en la luz pública. Se requiere, urge, que los secretarios y subsecretarios hagan política. El potencial del gobierno está en la luz pública, no en la oscuridad. 

Por otra parte, si bien es cierto, el dirigente estatal del PRI, Carlos Gandarilla, recorre el estado, habla con la gente y organiza a los líderes locales, en la tarea que realiza no hay seguimiento ni acompañamiento de los sectores y organizaciones.

Los dirigentes de los sectores y organizaciones del PRI siguen en la más completa orfandad de ideas. Se la llevan en la “vida social”, los días se les van en puro Facebook, pero sin contenidos de calidad, sin sustancia. 

No hay pronunciamientos sobre programas ni acciones del gobierno priista. No se informan. Sólo publican selfies para exhibir sus lujos. Impera la vanidad. 

De trabajo político no hay nada que presumir. 

Lo dicho, al gobierno de Quirino Ordaz le hace falta un cambio de estrategia… le urge un golpe de timón.

GRAFITI

El Trébol, con acuerdo o sin acuerdo, no respetó ni tiempos ni formas. Al iniciar su activismo político al siguiente día de la aprobación de las cuentas públicas, sonó como fanfarria fuera de tono. 

Si hubo generosidad, le faltó prudencia y paciencia. Si no la hubo, es una imprudencia asociada a un reto para los priistas.

La Senaduría para el Trébol está muy lejos, muy lejos. Si hay acuerdo, tendrá que conformarse con una Diputación Federal y sería, no hay que negarlo, aspirante al 2021, porque se mantendría vivo. 

Pero, ¿lo aceptarán los priistas? 

Twitter: @victortorres_mx


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