12/24/2025 06:25:00 a. m.
La segunda vuelta y temporada regular de la Liga Arco Mexicana del Pacífico se cierra en su recta final y así se encuentran las escuadras en sus últimos compromisos.
El standing ya tiene algunas definiciones y los playoffs están a la vuelta de la esquina.Así se jugará la serie navideña este 25 de diciembre.
La visita de los Algodoneros a Jalisco llega cargada de presión y urgencia. Con solo seis juegos por disputar, Guasave está obligado a ganar para no ceder terreno ante Mazatlán y Tucson y mantenerse con vida en la pelea por la clasificación. No hay margen para tropezar.
El contexto no ayuda: Guasave ha perdido sus últimas seis series y apenas se sostiene fuera de la zona roja, ubicado octavo en el standing. Del otro lado están unos Charros heridos, recién humillados en Tepic, pero que históricamente han dominado a los sinaloenses, a quienes han barrido en sus tres series más recientes.
Jalisco, pese al tropiezo, se mantiene cuarto, a tres juegos de la cima y quinto en la tabla general con marca de 35-27. Guasave, en contraste, apenas ha ganado 22 de 62 encuentros y su cierre será bravo: Jalisco y luego Tucson.
Se acaba el margen, se acaba el tiempo. Es el momento de jugar con el cuchillo entre los dientes, porque en este tramo final ya no se planea la postemporada: se pelea por llegar a ella.
Mexicali llega a Culiacán con el orgullo tocado y el momento más delicado del calendario. La derrota de la serie ante Tucson extendió a cuatro su racha de series perdidas, un contraste marcado con aquel tramo donde Pat Listach encadenó seis series ganadas de siete y parecía tener todo bajo control.
Los Águilas han navegado de media tabla hacia abajo casi toda la campaña y este cierre no les concede tregua. Aunque el boleto a la postemporada se asoma, la realidad es que todo apunta a que deberán jugarla como visitantes.
Culiacán, en cambio, supo levantarse de una mala primera vuelta y hoy marcha segundo, aunque sus números recientes —cuatro triunfos en los últimos diez juegos— han apretado la pelea. El récord ganador ya está asegurado, pero aquella primera mitad sigue pesando.
Los guindas suman 14 puntos y el máximo posible es 15, una rendija mínima que todavía les permite soñar con abrir en casa, pese a haber perdido el liderato de la segunda vuelta.
El calendario tampoco concede respiro: Mexicali cerrará ante Jalisco y Culiacán frente a Nayarit. Se acaba el tiempo y esta serie puede marcar la ruta final de ambos.
Nayarit pisa Los Mochis en el mejor momento de su temporada. Los Jaguares no creen en nadie: vienen de barrer de forma consecutiva a Obregón y Jalisco, han ganado tres de sus últimas cuatro series, todas por limpia.
Del otro lado, los Cañeros han vivido semanas agitadas, con cambio de timón incluido, aunque han logrado reaccionar al ganar dos de sus últimas tres series tras caer en cinco juegos consecutivos.
Los números recientes marcan el contraste: el conjunto esmeralda ha ganado seis de sus últimos diez, mientras que Nayarit presume ocho triunfos en ese mismo lapso.
En la segunda mitad, los Jaguares asumieron el liderato, empatados con Tomateros, y se han metido de lleno a la pelea por los puntos, con 18 unidades, 2.5 más que los Yaquis. Nayarit ha competido de tú a tú con cualquiera y eso eleva el voltaje de esta serie. Cañeros, segundos en la primera mitad, hoy son quintos y viven de rachas.
Cerrar fuerte es la consigna: después de aquí, Los Mochis va a Mazatlán y Nayarit recibe a Culiacán. El margen se achica y esta serie puede mover el tablero en la recta final.
Arranca la cuenta regresiva y para Mazatlán no hay margen de error. Los Venados necesitan apretar el paso si quieren soñar con la clasificación, aunque ya no dependen solo de lo que hagan en el terreno.
Instalados en zona roja, su esperanza pasa también por tropiezos de Guasave, un escenario incómodo para un cierre que exige resultados inmediatos. Enfrente aparece Obregón, equipo ya clasificado desde que aseguró el primer lugar en la primera vuelta y que hoy navega sin presión en la segunda mitad.
Los Yaquis marchan sextos en esta parte del calendario, con el único objetivo de llegar embalados a la postemporada. Los diez puntos de la primera vuelta les permiten transitar por aguas tranquilas y pensar en abrir playoffs en casa. Tras esta serie, Obregón cerrará en Hermosillo, mientras que Mazatlán volverá al puerto para recibir a los Cañeros.
Los Venados son últimos en la tabla general y de puntos, una realidad tan dura como clara. Con seis juegos por delante, Mazatlán va por el milagro y Obregón por cerrar en plan grande.
La serie en Tucson llega con panoramas opuestos y urgencias distintas. Para los locales, la ecuación es simple y cruel: ganar todo lo posible y esperar tropiezos ajenos. Aunque vienen de ganarle a Mexicali y han ganado dos de sus últimas tres series, Tucson apenas suma cuatro triunfos en sus últimos diez juegos y ya no depende solo de sí mismo.
Del otro lado aparece Hermosillo, un equipo muy consistente durante la temporada. Los Naranjeros presumen seis series ganadas al hilo y se mantienen terceros, a solo un juego de la cima. La primera vuelta los dejó cuartos, pero el ritmo sostenido los tiene peleando por todo en la segunda mitad.
Hermosillo suma 15 unidades y aspira con argumentos a abrir la postemporada en casa. Tucson apenas alcanza ocho puntos y camina con el agua al cuello.
Tras esta serie, Naranjeros cerrarán en casa ante los Yaquis. Tucson lo hará frente a Guasave, en lo que puede ser una serie de vida o muerte. El camino se acorta y mientras Hermosillo avanza firme, Tucson intenta sobrevivir.