12/13/2025 08:36:00 p. m.
Cuando el pitcheo impone condiciones, no hay racha que resista. En Hermosillo, las Águilas de Mexicali sacaron brillo a su mejor arma, dominaron los tiempos del juego y le pusieron freno de mano a un rival que venía encendido.
Con una exhibición de pitcheo de alto nivel, las Águilas de Mexicali blanquearon 2-0 a los Naranjeros de Hermosillo para cortar una seguidilla de seis triunfos consecutivos de los sonorenses, confirmando por qué presumen el mejor cuerpo de lanzadores de la liga, encabezado por su as David Reyes.
Las únicas dos carreras del encuentro llegaron en la sexta entrada. Julián León abrió el episodio recibiendo pelotazo y avanzó a segunda con sencillo de Norberto Obeso. Yadir Drake rodó para out forzado, pero León aprovechó un error en el tiro del intermedista Edson García para timbrar la carrera de la quiniela. De inmediato, Drake robó la intermedia y Phillip Evans lo envió al plato con doblete al jardín izquierdo para el 2-0 definitivo.
Antes de eso, Hermosillo tuvo sus oportunidades, pero se topó con la jerarquía de Reyes. En la primera entrada, los Naranjeros llenaron las bases, pero Todd Lott rodó para doble matanza y el derecho salió ileso.
En la quinta, los locales colocaron corredores en segunda y tercera sin out, y nuevamente Reyes bajó la cortina al dominar a Andrés Sosa, José Cardona y Jasson Atondo para preservar el empate sin carreras.
David Reyes (6-2) firmó seis entradas en blanco de cinco imparables.
El bullpen emplumado completó la obra: Juan Robles, Jesús Cruz y Jake Sánchez (11) mantuvieron a raya a la ofensiva local, antes de que Jake Mate se acreditó el salvamento número 132 de su carrera en la LMP, quedando a solo dos rescates de igualar al líder histórico Isidro Márquez.
La derrota fue para Wilmer Ríos (6-3), quien trabajó siete episodios de seis hits y dos carreras, con relevos de Fernando Salas y Alan Rangel.
Mexicali ganó con autoridad silenciosa: sin estridencias, pero con control absoluto. Cuando el pitcheo manda y el guion se ejecuta al pie de la letra, el mensaje es claro para la liga: a estas Águilas no se les gana fácil, y mucho menos cuando su as sube a la loma.