Sinaloa | 06/02/2025 01:41:00 p. m. | Osmar Zavala
La esperanza renació para Edith Sarmiento, una joven mujer de 33 años que desde la adolescencia ha vivido bajo la sombra de la insuficiencia renal.
Este mes de mayo, su vida dio un giro inesperado gracias a un acto de amor incondicional: su padre, Édgar Fernández, decidió donarle uno de sus riñones.
El procedimiento se llevó a cabo en el Hospital Fátima de Los Mochis, el único en el noroeste de Sinaloa autorizado para realizar trasplantes de órganos, y que ha ganado prestigio por su capacidad médica y humana en este tipo de intervenciones.
Edith fue diagnosticada con diabetes tipo 1 cuando tenía apenas 15 años, condición que con el tiempo deterioró severamente su función renal.
A pesar de años de tratamientos, restricciones y cuidados extremos, su salud se fue debilitando, hasta que llegó el momento más temido… y también el más esperado.
“Siempre supe que, si llegaba el día, yo iba a estar listo para ella”, dijo su padre. Desde el diagnóstico, se había preparado física y emocionalmente para convertirse en su donador.
El trasplante se realizó con éxito el pasado 2 de mayo, y tras días de recuperación, Edith hoy sonríe, agradecida no solo con su padre, sino también con el equipo de médicos y especialistas que hicieron posible esta nueva oportunidad de vida.
“Volver a respirar tranquila, sin máquinas, sin diálisis, es un regalo que nunca podré pagar”, compartió Edith.
Agradeció al personal del hospital por su acompañamiento durante el proceso y reconoció el esfuerzo de los médicos que participaron en la cirugía, entre ellos los doctores Carlos Álvarez, Samuel Valdespino, Gustavo López y Fabián Cota, entre otros profesionales.
El Hospital Fátima cuenta con una década de experiencia en trasplantes y ha realizado con éxito más de una decena de procedimientos de riñón y córnea.