El príncipe de Gales se arrodilló ante su padre, el rey Carlos III, y le juró lealtad
Internacional | 05/07/2023 10:17:00 a. m. | Axel Estrada
El príncipe de Gales recibió un «Gracias Guillermo», de parte de su progenitor en la ceremonia de coronación.
El príncipe Guillermo, heredero al trono británico, se arrodilló ante su padre, el rey Carlos III, durante su coronación este sábado 6 de mayo del 2023, y le juró lealtad en un emotivo momento que conmovió a los presentes.
El príncipe Guillermo fue el único miembro de la familia real británica y de la nobleza que realizó el homenaje de la sangre real, un gesto que también hizo su abuelo, el príncipe Felipe, cuando juró lealtad a la reina Isabel II en su coronación.
«Yo Guillermo, príncipe de Gales, te prometo mi lealtad y te daré fe y verdad, como tu señor de la vida y el cuerpo. Así que ayúdame Dios», dijo el heredero al trono ante su padre.
Después de jurarle lealtad, el príncipe Guillermo tocó la corona de San Eduardo que llevaba su padre en la cabeza y le besó en la mejilla izquierda.
El rey Carlos III agradeció tímidamente a su primogénito por su juramento ante él y también por mantener la tradición de la sangre real en la familia.
La Iglesia también juro lealtad
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, también expresó su fidelidad al monarca en nombre de la Iglesia antes de invitar a los presentes y a todo el pueblo a hacer un juramento público de lealtad al rey.
«Hago un llamamiento a todas las personas de buena voluntad del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y de los demás reinos y territorios para hacer su homenaje en el corazón y en la voz, a su Rey indudable, defensor de todos. Todos los que así lo deseen, en la Abadía y en otros lugares digan juntos: Juro que prestará fiel lealtad a vuestra majestad y a vuestros herederos y sucesores conforme a la ley. Así que ayúdame Dios», dijo el arzobispo.
Ceremonia de la Sangre Real
El homenaje de la sangre real es una antigua tradición que se remonta a la Edad Media y que ha sido realizada por los herederos al trono británico desde el siglo XIII. Es decir, se trata de una tradición milenaria que se ha convertido en una de las más importantes de la realeza.
Con este gesto, el príncipe Guillermo ha demostrado su compromiso con su deber como futuro monarca y ha honrado la memoria de sus antepasados.