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LMP: Yaquis de Obregón vence y sepulta a Venados de Mazatlán
Para los Venados, el telón cayó en Obregón, en una noche donde el beisbol recordó que cada out pesa y cada hit puede ser definitivo.
El beisbol también sabe ser cruel y poético en la misma jugada. Los Yaquis supieron esperar su momento, resistieron cuando el juego parecía cuesta arriba y, fieles a su historia, encontraron la luz en el instante justo.
¿Cómo se desarrolló el juego entre Yaquis y Venados?
Remontaron una desventaja mínima, empataron con paciencia y corazón, y en la décima entrada dejaron en el terreno a los Venados con victoria de 2-1, un resultado que además marcó el final del camino para Mazatlán en la temporada.
La noche arrancó con silencio en el dugout local. En la parte alta del segundo episodio, Keven Lamas conectó cuadrangular solitario al jardín izquierdo, un batazo que adelantó a los Venados 1-0 y que, a la postre, sería todo lo que su ofensiva lograría producir ante el pitcheo de Obregón.
A partir de ahí, el juego se volvió un duelo de nervios y lanzadores. Felipe González mantuvo a raya a Mazatlán durante seis entradas de trabajo sólido, permitiendo cuatro hits y una sola carrera, mientras recetaba cinco ponches.
El bullpen de Yaquis continuó la obra con Cristian Alvarado, Jonathan Aro y Efraín Contreras, sosteniendo el juego vivo hasta que la ofensiva respondió.
Esa respuesta llegó en la parte baja de la sexta. Víctor Márquez negoció base por bolas y se robó la intermedia, metiendo presión inmediata. José Gaitán fue puesto fuera en jugada de selección, pero segundos después se reivindicó con el robo de segunda tras una revisión que confirmó la jugada. Entonces apareció Sebastián Elizalde, quien con sencillo al izquierdo mandó a Gaitán al plato para empatar el encuentro 1-1 y devolverle el aliento al estadio.
Detalles de la victoria y consecuencias para Mazatlán
El desenlace quedó reservado para la décima entrada, como dictan las noches de alta tensión. Víctor Márquez arrancó en segunda base y Vidal Nuño decidió otorgar pasaporte intencional a Allen Córdoba. Gaitán tocó la bola para avanzar corredores, aunque Márquez fue retirado en tercera. Con corredores en posición de anotar, Sebastián Elizalde volvió a tomar el protagonismo. Un lineazo al jardín izquierdo fue suficiente para que Córdoba cruzara el plato y Obregón celebrara el triunfo dejando tendidos a los Venados.
Manuel Chávez (1-4) se acreditó la victoria con una entrada impecable y dos ponches. La derrota fue para Vidal Nuño (2-0), quien permitió la carrera de la diferencia en la décima entrada. Por Mazatlán, Aaron Shortridge había firmado una sólida apertura de cinco entradas y dos tercios, con un hit, una carrera y tres ponches, seguido por un largo desfile de relevistas: Demetrio Gutiérrez, Pablo Téllez, Rafael Kelly, Óscar Rojas y Nuño.
Así, entre batazos oportunos y pitcheo valiente, los Yaquis escribieron una página más de carácter y resistencia. Para los Venados, el telón cayó en Obregón, en una noche donde el beisbol recordó que cada out pesa y cada hit puede ser definitivo.
