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Dan el último adiós a Jairo, el joven mánager de beisbol fallecido por intoxicarse con amoniaco
Familiares, amigos y jugadores despidieron al joven entrenador en el estadio de la colonia 75, recordando su entrega y compromiso con el deporte infantil
Con profundo dolor y muestras de cariño, familiares, amigos, compañeros de liga y decenas de niños de equipos infantiles despidieron este viernes al mánager Jairo Adán Zamago Navarrete, de 30 años de edad, quien falleció la madrugada del jueves 23 de octubre presuntamente a causa de una intoxicación por inhalación de gas amoniaco.
El homenaje de cuerpo presente se llevó a cabo en el estadio de la colonia 75, donde la Liga de Béisbol Teodoro Higuera rindió tributo a quien fuera uno de sus entrenadores más entusiastas y queridos.
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Dan el último adiós a Jairo
Durante más de dos horas, los presentes compartieron palabras, recuerdos y lágrimas al recordar a Jairo, reconocido por su pasión por el béisbol y su labor formando a niños y jóvenes en el deporte.
Niños del equipo Red Sox, al que Jairo dirigía, asistieron al homenaje acompañados de sus padres y compañeros de la liga, quienes dejaron ver sus muestras de cariño y lamentaron la muerte su Coach.
Entre aplausos y silencio, el campo donde tantas veces dirigió partidos se convirtió por un momento en escenario de despedida.
En redes sociales, desde que se anunció su partida, muchas personas y amigos y compañeros han lamentado su muerte, los comentarios son enfocados a que era un gran coach, qué siempre motivaba a los niños, los enseñaba a competir y a disfrutar el juego.
Más allá de su labor profesional, Jairo era reconocido en la comunidad deportiva de Los Mochis por su entrega al béisbol y por fomentar valores entre niños y adolescentes. En cada entrenamiento, buscaba motivar a sus jugadores a dar lo mejor de sí, tanto dentro como fuera del campo.
Su partida deja un vacío profundo entre quienes lo conocieron, pero también el ejemplo de un joven apasionado por el deporte y comprometido con formar nuevas generaciones.
Cabe mencionar que al finalizar la ceremonia en el estadio de la colonia 75, el cuerpo fue trasladado al panteón Jardines de la Memoria, donde será sepultado para el descanso eterno.
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¿Cómo murió?
De acuerdo con la información oficial, Jairo laboraba en la planta eléctrica Iberdrola – Topolobampo II, ubicada en la comunidad de Choacahui, sindicatura de San Miguel Zapotitlán, en el municipio de Ahome.
Los primeros reportes indican que, durante su jornada del miércoles 22 de octubre, habría abierto un contenedor que contenía residuos de amoniaco, lo que provocó que inhalara el gas y sufriera una intoxicación.
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