Sinaloa | Norte
Entre el agua y la desesperación; la historia de María Francisca, evacuada al refugio del Cobaes 02
Entre goteras, recipientes y el temor de perderlo todo, una familia de la colonia Invasión Malova enfrentó las lluvias que azotaron Los Mochis este domingo.
Las lluvias de este domingo en Los Mochis sorprendieron a decenas de familias de la colonia Invasión Malova, donde las viviendas construidas con lámina, cartón y retazos de madera no resistieron la fuerza del agua, y algunas familias tuvieron que ser evacuadas.
En medio de esa situación se encontraba María Francisca Ceceña Valenzuela, una mujer que pasó la noche en vela tratando de evitar que la lluvia destruyera lo poco que tiene.
Y es que desde muy temprano, cuando comenzaron las lluvias derivadas de los remanentes de la tormenta tropical Raymond, la señora María Francisca notó que el agua se filtraba por todos lados.
Su techo de lámina no resistía más, y las goteras caían a cántaros, empapando el interior de su vivienda.
La plática entre las afectadas no era otra más que como el agua, se les metió a sus casas y se les mojaron sus pertenencias, principalmente la ropa, el colchón y otras cosas que a duras penas pueden tener.
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La señora contó como pasaban las horas, y el agua comenzó a meterse con más fuerza por el suelo. El pequeño cuarto que sirve de sala y recámara empezó a inundarse por completo.
La señora María Francisca intentó salvar sus pocas pertenencias: ropa, documentos, utensilios de cocina y un televisor. Pero nada parecía suficiente ya que el agua se metía por todas partes.
"Uno hace lo que puede, pero es triste ver cómo el agua se mete por todos lados y no hay cómo detenerla", dijo la mujer mientras recordaba los momentos de desesperación que vivió antes de ser evacuada de la colonia invasión Malova, ubicada a espaldas de Miguel Hidalgo, en la zona conocida como Los Cocos.
A pesar del refugio, la preocupación sigue presente. María Francisca sabe que, cuando la lluvia cese y regrese a su vivienda, deberá enfrentar la dura realidad: recuperar lo poco que quedó seco y limpiar.
María Francisca, junto con su familia, pasará la noche en el albergue. Allí, al menos podrá descansar bajo techo seguro y comer algo caliente. Sin embargo, su preocupación son sus cosas y lo que perdió porque se le mojó con la lluvia.
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