México
Fraude en Cuaresma: Venden hielo por pescados y mariscos, según Oceana
De acuerdo a una investigación hecha por la organización sin fines de lucro, durante la venta de pescados y mariscos se ha encontrado una práctica fraudulenta
Es muy común que durante la Cuaresma se consuman pescados y mariscos, pero lamentablemente, este año se ha detectado un fraude en este producto, por lo que debes poner especial atención al momento de su compra.
Oceana, una organización sin fines de lucro que se dedica a la investigación científica y a la conservación marina, revelo que el nuevo fraude de Cuaresma incluye la venta de hielo en pescados y mariscos.
¿Pero como funciona este fraude? De acuerdo a una reciente investigación de Oceana, esta revelo que cuando se trata de pescados y mariscos importados, estos llevan añadidos hielo, el cual se le conoce como glaseado, con el fin de conservarlo fresco por más tiempo.
Sin embargo, al momento del pesaje de pescados y mariscos, también va incluido este hielo, el cual afecta el peso real del producto que se está obteniendo.
Mariana Aziz, quien es la directora de Transparencia de Oceana México, explico que a pesar de que el glaseado es una técnica común y aceptable para la conservación de pescados y mariscos, esta suele ser usada en exceso con fines fraudulentos.
“El problema es que muchas veces se abusa y el porcentaje de agua congelada que se añade es exagerado, afectando el bolsillo de los compradores y al sector pesquero nacional que ofrece producto con menos glaseado,” explico.
Pese a que este es un problema que afecta el bolsillo de los consumidores, utilizar hielo en pescados y mariscos no es una práctica regulada.
Es decir, que no existe un límite de cuanto glaseado se debe de usar y tampoco existe la obligación de reportar a los consumidores cuanto porcentaje es glaseado y cuanto es del producto.
Producto importado, el más afectado
De acuerdo al estudio realizado por Oceana, los filetes de pescado importados, principalmente basa y tilapia, tienden a tener niveles de glaseado más altos, con un 43% de los casos superando el 21%, mientras que los filetes nacionales rara vez superan el 10% de glaseado.
La situación es similar con el camarón congelado, pues del 70% del camarón importado excede el límite aceptable de glaseado
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