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«Gladis», la orca asesina que lidera una pandilla que hunde barcos. Aquí toda la historia

Según los especialistas, «Gladis» en el pasado fue víctima pescadores furtivos que intentaron cazarla, al quedar atrapada en unas redes y en su intento por sobrevivir, tuvo que golpear la embarcación que la iba a atrapar.

«Gladis», la orca asesina que lidera una pandilla que hunde barcos. Aquí toda la historia

Imagínate que andas paseando muy a gusto en tu yate cuando de pronto se acerca una pandilla de orcas y comienzan a golpear el bote. Pareciera de película, pero es realidad. Esta es la historia de Gladis y su camarilla de ballenas asesinas.

A principios de mayo, un yate que navegaba por el Estrecho de Gibraltar, frente a España, fue embestido por un grupo de ballenas, el cual era comandado por una orca, a quien los investigadores la llamaron «Gladis», cuyo comportamiento hostil despertó el interés de los científicos.

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Según los especialistas, «Gladis» en el pasado fue víctima pescadores furtivos que intentaron cazarla, al quedar atrapada en unas redes y en su intento por sobrevivir, tuvo que golpear la embarcación que la iba a atrapar.

Se dice que tal hecho causó un trauma en la ballena, que ahora repite, pero acompañada de otras orcas, que al ver una embarcación cerca de ellas, «Gladis» encabeza el ataque a los botes o barcos que se les cruza en su camino, generando temor a sus tripulantes.

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La información de los especialistas precisa que el comportamiento salvaje y hostil de «Gladis» es imitado por otras ballenas, lo que preocupa que ahora los ataques son como si fuera una pandilla liderada por el cetáceo traumatizado.

Medios internacionales han registrado ataques de ballenas asesinas en costas de costas inglesas, en donde unos turistas relataron a un periódico británico cómo un grupo de orcas, liderada por «Gladis», se acercaron al bote con el fin de atacarlos, acción que les causó terror.

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Otros ataques también fueron documentados en costas portuguesas y en la costa ibérica, en donde ya prohibieron la navegación en unas zonas, debido a los innumerables ataques de ballenas asesinas.

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