AMLO tiene que sofisticar su concepto de corrupción: Jacqueline Peschard

Los Mochis, Sin.-  Las medidas de austeridad en la función pública de Andrés Manuel López Obrador son necesarias y populares, pero muy lejanas de acciones verdaderas que vayan encaminadas al combate de la corrupción, y esto se debe a que el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador “tienen un concepto de corrupción demasiado sencillo”, así considera la doctora Jacqueline Peschard Mariscal.

Ella es miembro del Seminario de Cultura Mexicana y ex Presidenta del Comité de Participación Ciudadana y del Comité Coordinador del Sistema Nacional Anticorrupción y, en su experiencia, enfatizó que urge que AMLO más allá del idealismo: del olvido y perdono, asegure los mecanismos y estructuras para que se castigue a quienes han cometido delitos contra la sociedad.

 “Es una tarea muy complicada, no es nada más de decir yo voy, y abandero la corrupción, como quiere hacer López Obrador. López Obrador tiene que sofisticar su concepto de corrupción, porque tiene un concepto de corrupción demasiado sencillo. Como si ésta fuera nada más una cuestión de voluntad, es como si yo voy a perseguir a los corruptos, y por voluntad van a desaparecer. Pues no es de voluntad, es de cambiar estructuras, cambiar mecanismos, cambiar prácticas y de sancionar prácticas, y castigar prácticas en las fiscalía”, dijo.

Durante la conferencia que impartió en la Facultad de Derecho y Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Sinaloa, enfatizó que los costos de la corrupción son muchísimos, entre ellos: “la afectación en el desarrollo económico de la sociedad y provoca una sangría de recursos destinados a los programas sociales; absorbe hasta el 8 por ciento del PIB; y, de acuerdo a la Cumbre Anticorrupción del 2016, tiene un costo de un trillón de dólares anuales”.

Subrayó que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha colocado la lucha contra la corrupción en el centro de su agenda pública. Incluso, planteó 50 lineamientos para combatirla, pero el Sistema Nacional Anticorrupción, la cual nació de la sociedad en su necesidad de participación en este tema, no es parte de su estrategia gubernamental.

 “En esos 50 lineamientos no hay una sola referencia al Sistema Nacional Anticorrupción; entonces, es como si fuera la estrategia del Gobierno Federal va por un lado, el Sistema Nacional Anticorrupción va por otro. Entonces, una cosa que urge es que la estrategia se haga cargo de un Sistema y cómo pone en actividad ese Sistema. Pero, lo primero que hizo el gobierno de Andrés Manuel López Obrador fue reducirle presupuesto al Sistema, entonces esa es una señal de que el Sistema, mucho, mucho, no le interesa”.

Aceptó que el combate a la corrupción no es algo que se logrará de la noche a la mañana, pero para ello es necesario incrementar la transparencia en los presupuestos gubernamentales, la información fiscal y los procesos de contratación; facilitar las denuncias de empleados públicos o privados sin miedo a represalias; perseguir y castigar a los corruptos, recabar activos robados y restituirlos a sus legítimos dueños.

Y, por último, impulsar la innovación y nuevas tecnologías para investigar y controlar actos de corrupción.

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