Nueva enfermedad social: “Kerfobia"

El miedo a morir es la definición más reducida y completa de la tanatofobia. 

Según la mitología griega, Tánato era la personificación de la muerte sin violencia, trabajaba como su gemelo Hipnos, el sueño. 

La muerte violenta estaba a cargo de las hermanas de Tánato, las Keres. Ellas eran amantes de la sangre y su materia prima la obtenían en los campos de batalla. A las Keres se les consideraba los espíritus femeninos de la muerte, especialmente la muerte violenta, ya que la muerte natural estaba a cargo de Tánato. 

Con esta analogía se puede entender la naturaleza tanatofóbica del humano y la construcción de mentes “kerfóbicas”. 

A la muerte natural y a la locura cualquiera le puede temer de manera razonada, pero el solo pensar en la muerte violenta, puede poner en pánico a cualquier mortal. 

Saber que te vas a morir de viejo es una cosa; saber que te pueden arrebatar la vida en forma violenta, es otra. 

Cuando la kerfobia se apodera de las personas, esta condición se puede contagiar hasta con la mirada y no se diga con la información. 

Saber que todos los días estilarán sangre los periódicos y los medios electrónicos de comunicación, incluyendo las redes sociales, expondrán de manera explícita la cronología del delito, y la violencia gráfica más que herir susceptibilidades construirá la kerfobia: el miedo a la muerte violenta. 

¿De qué tiene miedo el pobre? Que le quiten la vida. ¿De qué tiene miedo el rico? Que le quiten dinero, bienes y la vida. Al final del día, el pensamiento de los kerfóbicos se resume en una frase: “Lo material como sea, pero la vida…” 

La vida es la única propiedad valiosa en el humano, todo lo demás en el mejor de los casos es importante. 

Por eso, tanatofóbicos y kerfóbicos le temen a la muerte; los primeros por inevitable y los segundos por la forma violenta en que aparece. 

Hay que hacer una precisión: no todos las personas víctimas de la muerte violenta eran kerfóbicas. Mientras los sociópatas o sicarios tienen conciencia del precio que pueden pagar por su actividad delictiva, los kerfóbicos construyen su miedo a la muerte violenta, basados en una realidad objetiva o en una percepción social subjetiva.